El Palacio Subterráneo de Moscú

Tener 44 estaciones catalogadas como Patrimonio cultural hacen del metro de Moscú un espacio de belleza  y arte únicos en el mundo; donde además han nacido 217 niños, cuando sus paredes eran un segundo hogar que los protegían de los bombardeos de la guerra y les permitían a los moscovitas ir a la peluquería, hacer compras en todo tipo de tiendas y hasta encontrar en la biblioteca pública el libro que los entretuviera en los interminables días de los ataques.

Con el lujo y la pomposidad de un palacio, con estatuas, con cantidades ingentes de mármol, con mosaicos de todos los colores, con frescos, con las fastuosas lámparas originales y únicas, este subterráneo que ha puesto todo su esplendor  al uso diario y rutinario del pueblo, nos deja sin aliento.

En sitios como este no podían faltar los fenómenos sobrenaturales e inexplicables que a través de mitos y leyendas embellecen aún más su entorno. La historia de la línea circular, la Koltsevaya,  que tuvo esa forma y ese recorrido por el descuido de Stalin de colocar su tasa de café justo sobre los planos del metro quedando marcado el circulo que lo impulso a construirlo de esta forma; la del guardavía que todavía recorre feliz sus túneles aunque murió a los 82 años amando su trabajo; la leyenda del maquinista negro, tostado y triste que aún se ve  vagando por los rieles donde pasó el accidente del vagón quemado, del cual fue culpado después de muerto; la fábula del ingeniero que trabajaba en una de las estaciones y al darse cuenta que el cemento que había no permitía terminar a tiempo, no dudó en pagar con la mitad de su apartamento las 100 toneladas que hacían falta; la de los constructores que se negaban a trabajar en algunas estaciones consideradas malditas porque se escuchaban extrañas voces , sonidos y apariciones; y para terminar la leyenda del plan del metro estratégico secreto para los gobernantes, que se cree fue posiblemente ideado por el desconfiado, precavido y astuto dictador Stalin.

En esta construcción subterránea ha habido hallazgos sorprendentes: de casas enteras hasta con sus muebles sepultadas, restos humanos, cementerios, una piedra enigmática que terminó considerándose de la época del paganismo y  con poderes, fuegos  misteriosos o niebla que adquieren formas fantasmagóricas y hasta una arcilla azul con propiedades curativas que se terminó usando para rejuvenecimiento y dolencias artríticas.

Además de las leyendas hay datos reales muy interesantes.

En sus 83 años de historia el metro moscovita solamente ha tenido un día de descanso: el 16 de octubre de 1941, cuando bajo el pánico general de tener que entregar la ciudad a los alemanes, el alcalde había dado la orden, afortunadamente cancelada, de dinamitarlo.

Las estaciones profundas del metro empezaron a construirse en su cuarta etapa y fueron ideadas como refugios en caso de una guerra nuclear y se decoraron con imágenes que celebran las victorias en la guerra contra Napoleón y en la Gran Guerra Patria.

En la línea nº 5, que es la circular, por el alto parlante se indica a los viajeros el sentido en que viaja el tren; si la voz es de un hombre el tren va en el sentido de las agujas del reloj, y si es de una mujer va en sentido anti-horario. En las líneas rectas la voz  del hombre indica que te acercas al centro de la ciudad, y de la mujer que te alejas. Nos preguntamos si estos códigos habrán sido el resultado de encontrar alguna similitud con el comportamiento masculino y femenino?

4 comentarios:

  1. Definitivamente hay que ir a ese hermoso país, tus relatos nos tienen antojados. Mil gracias por compartir. Un abrazo Luisa Fda

  2. Que agradable e interesante son todas tus publicaciones….

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *