Memorias de la II Guerra Mundial en Polonia
La II guerra mundial es en general para nosotros los latinoamericanos un evento ajeno, lejano y tan del pasado como la primera, excepto para, por supuesto, historiadores, profesores, políticos estudiosos (pocos) y uno que otro aficionado y curioso de la guerra y sus estrategias. Carlos es uno de ellos, no me atrevería a decir que toda su vida, pero casi, ha leído, investigado y visitado todo lo que le ha sido posible sobre este doloroso evento histórico, sobre el cual como todos sabemos hay muchísima información, pero con el conocimiento de Carlos y suficiente investigación nos atreveremos a hacer nuestra versión, por supuesto reducida, de lo que pasó.
Como siempre hay que ubicarnos en el tema. Para empezar aunque parezcan eventos aislados la I y la II guerra están muy relacionadas, ya que cuando termina la primera se firma el Tratado de Versalles (Septiembre 1919) un acuerdo de rendición de Alemania (cero y van dos), cuyos términos lo obligaban casi a ser un país agricultor, sin ninguna fuerza militar, con una deuda casi imposible de amortiguar y en general con casi todas las condiciones tan fuertes, duras y denigrantes que fue generando un sentimiento de rabia, repudio y venganza en el pueblo alemán, muy bien utilizado por Hitler cuando subió al poder. La difícil situación económica que causaban en el pueblo estas condiciones, al final ayudaron al partido nacional socialista a llegar al poder (1933), nombrando Hitler un ministro de hacienda que logró financiar obras públicas y conformar la parte militar desde el punto de vista financiero, a escondidas de los otros países, generando de esta manera empleo y llevando a Alemania a iniciar su fortalecimiento.
Otro punto a tener en cuenta es la asignación de la región del Rurh (hoy la zona más industrial de Europa), productora de carbón y acero que pertenecía a Alemania y que en los acuerdos le fue asignada a Francia. Hitler decide tomarla en condiciones difíciles ya que solo contaba con reducidas tropas, pero ante la no respuesta de los franceses, recupera este territorio de gran importancia para la producción industrial y armamentista, generando un crecimiento no solo económico sino el inicio de un sentimiento patrio en el pueblo alemán.
Hitler decide entonces entrar a su país natal Austria, con un ejército que apenas estaba conformando, con el beneplácito de una gran mayoría de los austriacos y continuar luego a Checoslovaquia, con el visto de bueno de Inglaterra, donde los checos no tuvieron ninguna oportunidad de defender su patria.
Ya para esta época Alemania tenía una imagen de poderío en Europa como un país en crecimiento y desarrollo y lo más importante Hitler tenía clara su doble ideología: convertir a Alemania en un imperio, invadiendo países para tomar sus tierras y mantener una raza aria pura, considerando inferiores a judíos, gitanos, eslavos, homosexuales.
Hitler y sus militares, para cumplir sus objetivos se prepararon para la guerra y cuando consideraron que ya estaban listos, decidieron tomarse a Polonia. Sabían que si lo hacían posiblemente Rusia los atacaría, así que para avanzar poco a poco sin mayores riesgos, decidieron hacer un acuerdo secreto entre Hitler y Stalin en el cual se dividían el país por mitad. Como necesitaban internacionalmente una excusa para iniciar la guerra, crearon una situación pueril disfrazando alemanes de militares polacos, quienes se tomaron una emisora de radio en la ciudad de Gdansk, región de Pomerania. Hitler entonces decidió que iba a defender a los alemanes que vivían allí, porque su seguridad estaba amenazada e inició las hostilidades. A los tres días, Reino Unido, Francia, Australia y Nueva Zelanda le declararon la guerra a Alemania.
Como no podía ser de otra manera el viaje lo empezaremos por este lugar donde se inició la II guerra mundial. En la próxima publicación estaremos en la ciudad de Gdansk.
Que buen resumen, gracias.